lunes, 18 de enero de 2010

TODOS CON AHITí

Las sacudidas registradas por la escala Richter en la porción oriental de La Española derrumbaron los restos de una nación de diez millones de habitantes descalabrada por los déspotas, la corrupción, los fracasos, la deforestación, el analfabetismo y enfermedades casi bíblicas. Los 250.000 niños entregados por familias míseras a hogares menos míseros, en régimen de semiesclavitud y desamparo, son una de las numerosas lacras padecidas por el país de origen africano, que se sostiene gracias a los 9.000 miembros de la misión de paz de la ONU, la constelación de ONG. Pero sin consensos parlamentarios y sin el apoyo de los países y grupos donantes, puede la inestabilidad política y la violencia.
Sólo las catástrofes rescatan del olvido al enclave negro, y sólo los huracanes del 2008 se llevaron más de 1.000 millones de euros y 112.000 casuchas de Haití, que disfrutaba de cierta estabilidad desde el derrocamiento del cura populista Jean Bertrand Aristide, en 2004, pero que nunca supo o pudo erradicar las causas de su postración. El ingreso promedio apenas alcanza los 600 dólares anuales y más de la mitad sobrevive con menos de un dólar diario. "Y si nos vamos nosotras, ¿quién cuidará a esta gente", comentaba una monja navarra a este periodista en su primer viaje al país, desarrollado en los noventa.

El terremoto más intenso sufrido en 240 años en Haití
Libera energía equivalente a la explosión de 200.000 kilos de dinamita, según los expertos

El terremoto de magnitud 7,3 en la escala Richter,registrado en Puerto Príncipe, la capital de Haití, liberó una energía equivalente a la explosión de 200.000 kilos de trinitrotolueno (dinamita), según expertos en geología. El presidente de Geólogos del Mundo, la ONG del Colegio Oficial de Geólogos de España, Angel Carbayos, ha explicado que la energía que se libera en un seísmo de esta magnitud provoca unos efectos devastadores y esos daños sobre las personas, los objetos y las construcciones son los que fijan la intensidad de un terremoto.

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