Ayer vimos el gran número de blogs de educación infantil que se presentan al VI Premio Espiral de Edublogs 2012, algunos de ellos de Galicia. En tiempos de pocas alegrías, hay maestros/as que no hacen recortes. Pese a que el sueldo va a menos y las horas de trabajo y responsabilidades van a más, muchos de los que trabajamos en esto creemos que una manera de defender la educación es mostrando lo que hacemos, compartiendo con otros, abriendo una ventana a las familias y la sociedad en general.
Son horas y horas de trabajo, no sólo en el aula, sino de esas que nadie tiene en cuenta y muchas restadas a la vida personal. Hay que rastrear por la red an la búsqueda de aquello que mejor se ajuste a nuestra manera de trabajar; reflexionar, adaptar, diseñar, probar, fotografiar o grabar, redactar, publicar y sobre todo, mostrar, exponer públicamente lo que hacemos; es como desnudarnos. Siempre nos hacemos una pregunta: ¿cuántas familias estarían dispuestas a hacerlo?, ¿cuántas inspecciones educativas mostrarían lo que hacen?, ¿cuántos tertulianos críticos pondrían su trabajo en el escaparate?, o mejor aun, ¿cuántas administraciones educativas dejarían ver sus producciones diarias y en lo que invierten sus horas de trabajo?
Y que no surjan suspicacias, porque estos premios no tienen dotación económica. Los que se presentan lo hacen tan sólo por el reconocimiento, no puede haber otro interés.
Si le echamos una ojeada a cada uno de los blogs vemos muy diferentes estilos docentes, algunos puede resultarnos más allegados a nuestra manera de trabajar y otros no. Pero lo que es indiscutible es que hay muchos maestros/as que trabajan con ilusión por lo que hacen. Unos inciden en la música, creyendo que es la vía para llegar a otros ámbitos; otros ponen su empeño en la educación en valores, otros en las TIC, otros en la lectura, en las lenguas, en los juegos, en la cocina ... somos todos gente bien diferente, y he ahí la riqueza para la educación y para los niños/las: a lo largo de su vida escolar vivirán con personas que tratarán de transmitirle sus pasiones, sus filias -y también las fobias- pero eso, irá conformándoles un bagaje mucho más rico.
Cierto es, que hay muchos grandes profesionales que no se muestran en la red y que no todo lo que se publica es de interés; estamos totalmente de acuerdo, pero con eso no le restemos mérito a quien lo hace, porque exponerse a diario, motiva y "obliga" mejorar.