Este juego me lo enseñaron en El Salvador una familia bien adorable. Gracias a Jacquelin y a todos sus enanos!!!!
Una persona se encarga de vender, otra compra y los demás son ollas.
Las personas que hacen el rol de ollitas se tienen que poner de cuclillas en una línea. El vendedor les pone el nombre a las ollas (colores, frutas, números, etc). Y luego se hace un pequeño diálogo entre la persona que compra y la que vende:
Comprador: ton ton
Vendedor: quien es?
C: la viejita cantinera
V: qué deseaba?
C: una ollita de listón
V: de que color (o fruta, números, etc)
C: negro
V: (como no hay ollas negras dirá) a la basura (dirá esta misma frase hasta que el comprador adivine un nombre)
C: azul,
V: (si hay una ollita azul) vaya pues…
La olla elegida se coloca de cuclillas y el comprador y vendedor la transportan de los brazos.
En ese camino pueden pasar dos cosas:
-
Si se sofá (se cae al suelo) la ollita vuelve a ser otra vez renombrada y recolocada con el resto de ollitas que están a la venta.
-
Si no se sofá y llega al final: el vendedor le preguntará, que quieres 3 pasos de hormiga (pasos pequeños) o elefante (pasos grandes)? La olla contestará y dará los pasos. Al acabar el comprador irá a por la olla. Si la alcanza será suya, si la olla alcanza a abrazar al comprador volverá a la tienda.
Este juego es divertido cuando todas las ollas que han sido vendidas (que el comprador a conseguido agarrar) intentan ayudar a transportar la olla. Al principio es más fácil pero cuando son muchas las personas que juegan puede llegar a ser complicado.
Espero que os guste mucho la actividad y quizás algún día pueda tener un video explicativo que os ayude un poco más.
Si jugáis os invito a que os grabéis y lo compartáis con los demás!
Un saludo y nos vemos pronto!!!!!
Irene
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