Por segundo año consecutivo, este galardón viene para Galicia; algo debemos estar haciendo bien en la educación infantil los maestros y las maestras gallegas.
Siempre decimos que comenzamos esta aventura con el ánimo de compartir con otras compañeras; que Innovarte no es más que una ventana en la que mostramos nuestro pensamiento, nuestras expectativas, nuestros deseos, incluso nuestras rebeldías sobre lo que ocurre en la etapa de educación infantil, algo que hacemos de forma voluntaria y gratuita que vemos compensado con los comentarios de las personas que nos siguen. Como bien sabéis los y las que nos seguís, los blogs Innovarte (gallego y español) son tres años de trabajo diario, a veces con más y otras con menos fuerza, fortuna, ganas, originalidad y compromiso. Son tres años de inversión de ilusión, tiempo y dinero; a nadie se le escapa el coste de las publicaciones, de las visitas de estudio y de las actividades que compartimos. Tres años ya es mucho tiempo si no se le mete una inyección de reconocimiento; no ocultamos que en más de una ocasión nos invadió el desaliento, por suerte, los ánimos recibidos nos ayudarán a tirar para delante.
Esto para nosotras es algo largamente acariciado. Cuando ganamos nuestro primero premio de innovación educativa, hace ahora doce años, una amiga ya nos habló de esta prestigiosa convocatoria; luego durante mucho tiempo que estuvimos fuera de las aulas no tuvimos nada con lo que presentarnos, y este año, consideramos que nos había llegado la ocasión de hacerlo; era una prueba dura, competimos por un único galardón, al que todos nos presentamos porque honestamente creemos que estamos a la altura de él. Afortunadamente para nosotras, el jurado tuvo a bien reconocer la labor de Innovarte Educación Infantil. No saben cuánto se lo agradecemos, justo ahora en este punto de inflexión.
En un año tan duro para los profesionales de la educación, los premios obtenidos son para nosotras como un bálsamo que mitiga las heridas. Nos enorgullece haber ganado en el 2012 un
Mestre Mateo y un
Giner de los Ríos, y queremos compartirlo con todos y todas vosotras, porque siempre decimos que lo que hace grande a Innovarte son sus lectores. Gracias a todos y a todas. Esperamos seguir estando a la altura de vuestra consideración.
Muchas gracias también al jurado; nunca sabrán el bien profesional que nos hicieron.
Y sobre todo, gracias a Don Francisco Giner de los Ríos, para nosotras un referente que siempre tratamos guíe nuestro desempeño docente. Cerramos esta entrada con una cita del
panegírico que le dedicó su alumno Antonio Machado, publicado en el Boletín de la Institución Libre de Enseñanza en febrero de 1915, y que, más que nunca, debemos tener presente.
"Don Francisco Giner no creía que la ciencia es el fruto del árbol paradisíaco, el fruto colgado de una alta rama, maduro y dorado, en espera de una mano atrevida y codiciosa, sino una semilla que ha de germinar y florecer y madurar en las almas. Porque pensaba así hizo tantos maestros como discípulos tuvo."
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