lunes, 7 de octubre de 2013

Comunicando



Comunicando


Posted: 06 Oct 2013 10:30 PM PDT

Después de que el verano nos dijera adiós, el otoño no ha tardado en venir a visitarnos. Los días grises y algo más frescos vienen acompañados de menos horas de sol y hacemos menos vida en el exterior, dos de los factores más importantes para cargarnos de energía y vitalidad.

Pero no os desaniméis, hay muchas cosas que podemos incorporar a nuestro día a día y mantener un buen nivel de energía. Tomad buena nota!



Por las mañanas, cuando te despiertes, reserva unos minutos para estirarte y permitir a tu mente y cuerpo ajustarse bien antes de levantarse. Respira profundamente y sé consciente del estiramiento de todos tus músculos. Es una buena forma de empezar el día.




Parece obvio, pero muchos de nosotros nos levantamos deprisa y corriendo y sin tiempo para sentarnos a la mesa y tomar un desayuno en condiciones. Tomar los nutrientes necesarios es imprescindible para tu productividad  después de tantas horas de ayuno. Si hace falta levántate un cuarto de hora antes y regálate un desayuno saludable.




El agua es fundamental para el buen funcionamiento de todos los sistemas de nuestro cuerpo.
La deshidratación es un gran causante de la fatiga, así que asegúrate de que estás recibiendo suficiente agua a diario.





Sé que dependiendo de la zona donde vivas es difícil encontrar sol durante los meses de otroño e invierno. Así que cuando el cielo nos regale unos rayitos de sol, sal a la calle y disfrútalos. Un paseo de diez minutos es todo lo que necesitas para beneficiarte de la energía natural del sol.





Sonreír es la mejor receta para el bienestar emocional y puede ayudarte a levantar los niveles de energía cuando te sientes un poco bajo. Rodéate de personas optimistas y contágiate de alegría.

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