La naturaleza permite a los niños aprender de las maravillas de la vida.
Pero en la ciudad, o en lo alto de un balcón de un piso, estas experiencias no están disponibles.
Y es por eso que la idea de un huerto urbano para niños me parece de lo más necesaria y enriquecedora, algo que debería estar disponible en el hogar de todo niño o niña.
Los niños necesitan naturaleza
Hace poco leí un artículo en el que se citaba un estudio para mí preocupante; tan solo el 10% de los niños y jóvenes de Inglaterra tiene acceso regular a la naturaleza, frente al 40% de la generación de sus padres.
Me pregunto cuál será la cifra en España, pero sin duda también estará decreciendo de forma alarmante.
Se está empezando a hablar del "trastorno por déficit de naturaleza", que es más que probable que tenga efectos profundos en su salud y en su bienestar.
Los expertos explican que los niños que crecen con poco o ningún contacto regular con el mundo natural, llegan a verse a sí mismos como separados y no como una parte del mundo natural, se sienten desconectados de la naturaleza llegando incluso a desarrollar biofobia, además de otra serie de problemas de adultos como: estrés, ansiedad, fatiga, asma, hiperactividad, obesidad, falta de vitamina D,...
Pero es que somos seres hechos para vivir en el medio natural, formamos parte de él, lo necesitamos, así que no es de extrañar que el contacto directo con la naturaleza forme parte integral de la pedagogía Waldorf y otras pedagogías alternativas.
El contacto con la naturaleza puede empezar en casa: los huertos urbanos
Una forma de interactuar positivamente con la naturaleza desde casa, aunque vivamos en un piso de 70m2 sin balcón, es crear un huerto urbano con los niños. ¿Por qué? La lista de beneficios que aporta es para planteárselo:
Beneficios de tener un huerto en casa
- Es una actividad saludable, que nos conecta con el mundo natural, promueve el amor y el respeto hacia la naturaleza, y es muy divertida para los niños.
- Los niños desarrollan también nuevas habilidades y aprenden sobre la naturaleza y la ciencia de cultivar sus propios alimentos.
- Pueden participar en todas las actividades del proceso desde la siembra, abono, cosecha, cocina.
- Cuidando y cultivando las plantas pueden desarrollar:
- confianza en sí mismos (alcanzando la meta de cosechar los alimentos que han cultivado),
- responsabilidad al estar al cuidado de las plantas,
- aprender relaciones de causa-efecto fomentando el razonamiento y el descubrimiento (por ejemplo, las plantas sin agua mueren, o las malas hierbas compiten con las plantas…),
- cooperación(puede ser una actividad compartida y de trabajo en equipo),
- creatividad(buscando nuevas formas y maneras de hacer crecer los alimentos),
- nutrición(aprendiendo acerca de los alimentos frescos de cultivo ecológico).
Nuestro huerto urbano
Hay muchas formas de crear un huerto urbano. Nosotros hace poco hemos comenzado el nuestro de la mano de Seed Box una propuesta que nace de un proyecto social de Cataluña que ha revolucionado el mundo de los huertos urbanos con sus mesas de cultivo de pequeña dimensión, con materiales reciclables, métodos de cultivo ecológico y a bajo coste.
La versión Brotes para niños es muy fácil de montar e ideal para niños a partir de 5 años.
Nos ha gustado tanto su concepto y nos parece tan importante fomentar este tipo de actividades en familia, que por eso queremos dar a conocer esta iniciativa.
De momento te puedo enseñar el proceso de montaje y siembra de nuestra mesa de cultivo, que a Sunflower le ha entusiasmado, ¡y espero que pronto podamos ver los resultados!
El montaje de Brotes
La mesa de cultivo para niños tiene nombre, se llama Brotes el simpático personaje al que damos vida para que en él crezcan apetitosas verduras que podremos utilizar en nuestros platos.
El kit viene completamente equipado para construir el huerto desde 0, así que no necesitas más que una regadera, un cubo para crear el sustrato y alguna pala. Nuestros complementos de jadinería son de Baby Caprichos, que son perfectos para las manos pequeñas de los niños y de muy buena calidad, además de preciosos.
Nuestro Seed Box incluye semillas de Tomate Cherry y de Rúcula, ¡ambos alimentos son ingredientes que utilizamos en nuestras recetas cada semana en casa! De hecho son imprescindibles en nuestra ensalada de pasta.
El proceso de montaje es sencillo e intuitivo, aunque todo viene muy bien explicado en el libro que acompaña el Kit.
Primero de todo, preparamos la estructura de la mesa: doblamos las patas, perforamos la base (para poder recuperar así los restos de agua de riego) colocamos el cuerpo de Brotes, y sus brazos y sombrero.
Es hora de decorar a Brotes, una de las partes más divertidas para Sunflower. El kit trae muchas pegatinas para darle personalidad a nuestra mesa de cultivo.
Ahora, preparamos el sustrato. Primero hidratamos la fibra de coco con agua y luego añadimos el humus de lombriz. Ensuciarse las manos siempre es muy atractivo para los peques, además que pueden aprender muchísimo en esta fase del proceso.
¡Y a la siembra! Como estamos en otoño, hemos plantado rúcula, que es más aconsejable para esta época del año, y que en unas 3 semanas ya podremos cosechar. Te iré mostrando el resultado de nuestro Brotes en Instagram.
Además, el libro que acompaña el kit "Planta, juega y cocina con Brotes" trae incluso recetas de cocina. Así que muy pronto esperamos poder probar alguna de estas recetas tan ricas con nuestra propia rúcula.
¡Y listo! Ahora solo nos falta regar a Brotes un poquito cada día y dejarlo en un lugar soleado, con un recipiente debajo para poder aprovechar los excedentes del riego.
¿Y tú tienes huerto en casa? Si no es así y te interesa uno de Seed Box, en su web los puedes adquirir, además hay varias versiones según la edad de los niños. La verdad es que me parece un regalo muy apropiado para estas Navidades y que está dentro de muchos presupuestos.
<<Hay un libro abierto siempre para todos los ojos: la naturaleza. – Rousseau>>
No hay comentarios:
Publicar un comentario