Podríamos decir que, a partir de los veinte años iniciamos un camino de retroceso en el que comienza nuestro envejecimiento. De forma lenta y paulatina, la realidad es que nuestro organismo se ve sometido a tres factores fundamentales que alteran el equilibrio entre los los fenómenos de degradación y de reparación, haciendo del organismo un sistema cada vez más frágil. Los tres procesos biológicos que lo alteran son: la oxidación debido a los radicales libres la glicación por efecto de la glucosa la inflamación por degradación celular Comprender el proceso También participan multitud de factores: psicológicos, sociales, genéticos, hormonales, ambientales, etc… En este sentido, es fundamental conocer el funcionameinto del cuerpo para comprender la incidencia del entorno sobre el envejecimiento. Hoy en día, profesionales de la salud y de la medicina, laboratorios farmacéuticos, etc… avanzan en la carrera contra el
envejecimiento, intentando descubrir el secreto de la longevidad La teoría genética Desde luego, el envejecimiento como proceso natural, no se corresponde necesariamente con la edad cronológica, pero debido al modo de vida o el desconocimiento de ciertas pautas, puede acelerarse. Según esta teoría, el envejecimiento viene programado en el genoma y son principalmente los genes los que definen el desarrollo. Fallos en la renovación celular Se calcula que, entre los veinte y los setenta años, el número de células disminuye en un treinta por ciento. Las células madre y las células intermitóticas se dividen renovándose si es necesario, pero esta capacidad de renovación se reduce considerablemente en el tiempo. Por otra parte, existe un gran número de células que desaparece sin posibilidad de reemplazo a lo largo de la vida.
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