Llegado este momento hay en algunos centros un debate abierto sobre si se deben redistribuir los grupos de infantil en el paso a primaria. Esto es algo que tiene que ser acordado en el propio centro en el caso de que se trate de un CEIP, o consensuado con el centro receptor de tratarse de una EEI y un CEP.
Nosotras somos partidarias de la redistribución, ya que en nuestro caso, hay grupos que ya comparten vida escolar desde hace cinco o seis años, si asistieron a infantil 0-3. Pero como hay muchas compañeras que esta medida vendría a incrementar el estrés que les puede suponer el paso a primaria, decidimos buscar opiniones en la red.
En el blog
Familiaycole recogen una aportación del orientador Jesús Jarque que reproducimos textualmente.
Ahora que se termina el curso académico y se comienzan a planificar algunos aspectos del próximo os traigo una propuesta que algunos orientadores y tutores nos hemos planteado en más de una ocasión: ¿ Sería una buena medida si redistribuyéramos los grupos de alumnos varias veces a lo largo de la etapa obligatoria? En la entrada de hoy os presento en qué consiste la medida y los argumentos a favor. En una próxima entrada los argumentos en contra.
De qué se trata
La medida solo se puede llevar a cabo en los centros de dos líneas o más. Consiste en cambiar la distribución de alumnos por clase del mismo nivel varias veces a lo largo de la escolaridad obligatoria.
Por ejemplo, se pueden cambiar al comenzar 1º de Primaria: el alumnado del A y del B se entremezclan y se hace una distribución nueva en 1º A y 1º B. Lo mismo puede volverse a repetir al terminar 4º de Primaria y pasar a 5º
A favor de resdistribuirlas
Si la medida se lleva a cabo sería con carácter educativo y pedagógico, procurando siempre favorecer el proceso de enseñanza y aprendizaje del alumnado. Las razones para llevarlas a cabo son:
1. Se cambiarían los roles. Muchos niños tienen asignados desde muy pronto roles dentro del grupo clase. Algunos roles son positivos, pero otros no lo son tanto: "el distraído, el lento, el bebé, el inquieto, el payaso…"
Los roles funcionan como "profecías de autocumplimiento" de manera que los niños se comportan en muchas ocasiones así, porque no tienen otra alternativa y porque es como los demás esperan que se comporten.
Cuando los grupos se mezclan muchos roles negativos desaparecen y esos niños empiezan de cero.
2. Clases etiquetadas. Lo mismo que ocurre con niños individuales ocurre con los grupos: llega un momento en que a las clases se les asignan unas etiquetas(casi siempre sin faltarle motivos) que hacen que como grupo se comporten así y que de cara a los profesores, ya crean una predisposición negativa hacia ellos.
Hablo de clases que se etiquetan como "charlatanes, inquietos…" Además es la pescadilla que se muerde la cola. Al tener "mala fama"son las últimas clases en ser elegidas y por tanto, no suele haber continuidad en las tutorías.
La redistribución de grupos también rompería esta dinámica
3. Se rompen rivalidades. Otro motivo a favor de redistribuir los grupos a lo largo de la enseñanza obligatoria es que se rompen rivalidades entre los niños y sus familias.
Suele ocurrir que a medida que se van haciendo mayores los alumnos, las familias del grupo A, por ejemplo, rivalizan con las del grupo B yesa rivalidad llega a los niños. Muchos conflictos en los recreos, en encuentros deportivos y otros problemas de comportamiento en las clases pueden estar asociados a esta rivalidad.
La redistribución de los grupos sanearía esta circunstancia y la rivalidad sería mínima
4. Se favorece la interacción social. Los niños tendrían que entablar nuevas relaciones y la red de amistades se ampliaría seguro. No dejarían de ser amigos de los niños de grupos anteriores, sino que ampliarían su círculo de amistad. Incluso los niños que por cualquier motivo van quedando más aislados tendrían una nueva oportunidad.
Además al rehacer los grupos siempre continuaría un número importante de alumnado juntos a pesar del cambio.
5. Se compensarían los niveles. Como medida pedagógica además, se podrían compensar los niveles promedio de las clases. En ocasiones, se van acumulando en un grupo el número de niños con dificultades. Al redistribuirlos los niveles se compensarían y la atención a la diversidad se haría de una manera más justa y eficaz
Criterios pedagógicos
La distribución se realizaría con criterios pedagógicos que tendrían en cuenta algunos aspectos:
• Que se favoreciera la integración y socialización del alumnado con necesidades especiales
• Aquellas relaciones que parecen positivas se pudieran continuar
• Compensar los niveles de las clases
• Atender la demanda de las familias a que su hijo o hija cambie de grupo
Resumiendo, las razones a favor de redistribuir los grupos varias veces en la escolaridad son las siguientes:
1. Se cambiarían los roles negativos asignados a los alumnos
2. Se cambiarían las etiquetas asignadas a las clases
3. Se romperían rivalidades entre alumnado y familias
4. Se favorecería la interacción social
5. Se compensarían los niveles de las clases
En una próxima entrada abordaré las razones en contra. Mientras tanto ¿Se te ocurren más razones a favor?
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