Aprovechando el inicio de año y un regalo clásico en estas fechas, los almanaques, quisimos ampliar nuestro conocimiento sobre estos recursos para medir el transcurso del tiempo.
A la vuelta de las vacaciones de Navidad le pedimos a nuestro alumnado almanaques de todo tipo: de mesa, de pared o de bolsillo. Así juntamos cerca de treinta variantes: grandes, pequeños, de faldilla, de mesa y/o pared.
Casi podríamos asegurar que en todas las aulas de infantil hay algún panel de control de los días de la semana, de los meses, de la climatología, de las estaciones, de lectivos y festivos, incluso se pode encontrar algún almanaque, pero se prefieren emplear esos otros más infantiles, comerciales o de elaboración propia. En cambio nosotras y dado que estamos con alumnado que en este año hace 6 años, quisimos ir un poco más allá.
Los almanaques que inicialmente tenían el propósito de aportar información sobre las estaciones y el clima, hoy en día son mucho más, y están presentes en casi todos los espacios en los que hay actividad, de modo que consideramos necesario introducir al alumnado en su interpretación y comprensión, algo más que la mera consignación diaria de la fecha.
En un primer momento nos dedicamos a ver las variantes que nos habían traído y la cantidad de información que contienen además de la tabular de días o meses. He aquí algunas de las curiosidades que pudimos observar y sobre las que conversamos:
-Formato: de bolsillo, de pared, de mesa, de taco, de pared/mesa.
-Presentación: horizontales o verticales con todos los meses a la vista, por semestres, por cuatrimestres, por trimestres, por bimestres o de una hoja por mes, en este caso pudiendo ser en tabla o en columna.
-Diferencias de color en los días laborables, festivos, celebraciones. En algunos sólo emplean dos colores y en otros tres o más.
-Lanumeración de los meses (1-12, I-XII), de las semanas (1-53), de los días (1-365). Modo de expresar una fecha: 1-1-2015, 01/01/2015; 01-I-2015 (meses en nº romanos); 1 de enero de 2015; Lunes, 1 de enero de 2015.
-La forma de organizar los días (en gallego, castellano, inglés o bilingües), con letra inicial, abreviatura o nombre completo. Aquí, como curiosidad destacamos que los calendarios en casi todos los países comienzan en el lunes, excepto en los anglosajones que lo hacen en domingo, algo que comprobamos recitando algunas canciones sobre de los días de la semana, en una o en otra lengua. Existencia de un espacio para anotaciones (diaria, semanal, mensual). La curiosidad de por qué en algunos casos, al final de mes pueden aparecer dos fechas en un mismo cuadro 23/30.
-Presencia de símbolos: de las fases lunares (a un lado del día correspondiente o en la cabecera/pie de página); de las estaciones (los más habituales: estrellas de hielo, flores, soles y hojas). Destaque de fechas señaladas con símbolos: Día de Reyes (los 3 reyes), Día de los Enamorados (con un corazón), días del cambio de hora (con un reloj que retrasa o adelanta 1 hora), día de entrada de las estaciones…
-Información adicional: santoral, refranes, proverbios, dichos… y otros en función de si se trata de calendarios religiosos, agrícolas, laborales o escolares.
-Otros: declaraciones como "2015 año de la luz" o mensajes como "No me tires, recíclame" o mapas con los prefijos provinciales…
Esta comparativa nos dio para muchos más temas como la relación entre las ilustraciones, imágenes, fotografías o símbolos con los promotores del calendario (panaderías, supermercados, pescaderías), así como la información que contienen relativa a esos establecimientos (nombre, dirección, teléfonos, web, RRSS, etc).
Una vez vistos y analizados los enviamos de nuevo a las casas para que así con sus familias puedan personalizarlos marcando en el calendario aquellas fechas significativas para ellos.
Ahora los tenemos todos colgados en el aula, a la vista y alcance de los niños, de modo que cada día, cuando hagamos la rutina de poner la fecha, cada uno podrá hacer una aportación enriquecedora para todos. Al final de cada mes, unos pasarán página, otros arrancarán una hoja y otros no, pero será una buena ocasión para ver la diversidad y variedad existente sobre una misma idea.
El trabajo con los almanaques va a dar mucho de sí, sin olvidarnos de otras variantes más modernas, como un electrónico que tenemos en el aula; ni de otros más artísticos como los que nos presentan en
Pinzellades al Mon; ni tampoco del hermoso "
Almanaque musical" de Antonio Rubio y David Pintor publicado en Kalandraka.
No hay comentarios:
Publicar un comentario